La historia laboral cubana, reflejada en Ana en el trópico, será el escenario primordial en el cual, la Anna Karenina de Tolstoi crezca en el inconsciente de los trabajadores de tabaco. Es así como Nilo Cruz, dramaturgo cubano que emigró a Miami y ganó con esta pieza el Premio Pulitzer, relata esta historia de desenfrenados amores.
Estamos hablando de la quinta puesta en escena del Festival Teatro Contemporáneo Estadounidense que en su tercera edición, se instala por primera vez al Espacio Plural en un puente escénico entre la Concha Acústica de Bello Monte y el Trasnocho Cultural. El evento en su conjunto es organizado por la Caja de Fósforos y la Embajada de Estados Unidos.
El título en inglés de la pieza es Anna in the tropics y fue premiada con Pulitzer en el año 2003 . Además recibió dos nominaciones para el Premio Tony durante sus presentaciones en Broadway. Y es que este dramaturgo ha sido uno de los autores más exitosos dentro y fuera de los circuitos teatrales importantes de los Estados Unidos en plazas como Public Theatre New York City, el Oregon Shakespeare Festival, el Studio Theatre de Washington sin contar el Pasadena Playhouse y el Lee Strasberg Theatre de Los Ángeles.
Jesús Carreño dirige Ana en el Trópico inmersa en una escenografía donde se rompe un lateral de la sala, sumergiendo al espectador en la fábrica de puros. Según reza la nota de prensa para el director, la obra es muy atractiva y transformadora porque habla de los cambios que los seres humanos debemos asumir como retos, para salir de nuestra zona de confort y así poder mejorar nuestras vidas.
¨Es una obra mágica porque en ella podemos ver como las artes nos puede transformar la vida, como un agente externo en este caso, la literatura, se convierte en algo interno y nos cambia la percepción del mundo por completo¨
Uno de los personajes que da un vuelco en su actuación es Antonio Ruiz, quién escala su personaje desde lo más tenue a la doble cara de la responsabilidad y la maldad inducidas por su propia familia.
En ese sentido Antonio afirma: ” Cuando leí la obra por primera vez ,creí que mi personaje desencadenaba los hechos que ocurren, pero luego, en una segunda lectura, me doy cuenta que él personifica la maldad en general y es un personaje que se ve empujado a cometer acciones que a consciencia creía que nunca cometería”.
Nos sigue comentando :“Es un hombre que acaba de pasar una pérdida muy grande ocasionada por uno de los lectores y queda muy afectado. La familia lejos de apoyar, introduce un lector nuevo, sin percatarse de las secuelas de esta decisión. ”
Antonio Ruiz explica que aprovecha la humanidad de su personaje para su construcción ¨ es una persona que trata de sobrevivir y hacer una nueva vida, olvidar las penas que lo afligen pero que de alguna manera ve violentado ese proceso de sanación,por parte de su propia familia¨.
La llegada del nuevo lector a las fábrica de puros desencadena la chispa fundamental de la historia y origina un conflicto entre trabajadores dóciles,perplejos por los conocimiento de quien les lee en su horario laboral y desempeña una profesión nacida como medio para elevar el nivel cultural de los tabaqueros que tienen una relación estrecha con la clase obrera colonial.
La obra posee un gran valor artístico cultural. Enfoca el tema migratorio cubano a Norteamérica al principio del siglo 20. La forma como el emigrante traslada sus costumbres al nuevo país, mantiene su idioma,el ron y el tabaco, y describe la familia y la tradición de un lector e instructor de los empleados, quienes gracias a esos conocimientos adquiridos en horario laboral , podrían surgir.
El lector debía poseer las aptitudes necesarias, como tener voz clara y una pronunciación correcta, ser lo suficientemente culto para poder interpretar lo que leía o, en muchas ocasiones, desaparecer dudas o servir de árbitro en discusiones sobre materias históricas, literarias y hasta científicas. Para probar sus aptitudes, el nuevo lector, por lo regular, debía pronunciar un discurso que atrapara la atención y la voluntad de los obreros.
En la obra se manejan otros tópicos como la lucha entre la modernidad y mundo cotidiano retrógrado o un punto interesante que el actor Antonio Ruiz acota ;el rechazo de la fábrica al futuro que su personaje de lector- instructor propone y además, en este mundo cubano antes de Fidel, hay referencias a Rusia una vez que muchos personajes expresan querer irse a Europa y a Rusia.
El elenco de Ana en el trópico estuvo integrado por Luis Domingo González, Antonio Ruiz, Omaira Abinade, Abilio Torres, Jesús Nunes, Adriana Romero, Leonardo Pinto y Verónica León. Con ellos los figuran Yureima Suárez, María Andreina Torres, Richard Pineda, Jeslin Valbuena y Karen Rosales.
Jesús Carreño asume la dirección de esta pieza y también es el responsable de la música; el vestuario es de Raquel Ríos, la iluminación de Gerónimo Reyes, la escenografía es responsabilidad de Jorge Matheus, la producción de campo de Pedro Arias y la asistencia de dirección de Jan Thomas Mora Rujano. La producción general es de La Caja de Fósforos.
Ana en el trópico se presentará en la Sala Plural del Trasnocho Cultural como parte de la programación del Festival de Teatro Estadounidense desde el 17 de agosto hasta el 16 de Septiembre, viernes a las 5 p.m y sábados y domingos a las 4 p.m. Para mayor información sobre la programación, se pueden consultar las redes sociales Twitter e Instagram: @lacajadfosforos y Facebook: La Caja de Fósforos. Reservación de entradas a través de www.lacajadefosforos.com.ve y Ticketmundo.