“No lo había pensado, pero es verdad y es bonito, el teatro tiene la necesidad de entenderse. Porque para un punto de vista artístico no lo puedes imponer, eso es el arte”, dice el director madrileño Andrés Lima en entrevista con El-Teatro. El encuentro se da en un ambiente expectante. Las elecciones generales de España son el cercano domingo 28 de abril de 2019 y Lima estrena una historia eternamente polémica: La vuelta de Nora o Casa de muñecas 2.
La obra escrita por el estadounidense Lucas Hnath está basada en Casa de muñecas de Henrik Ibsen. Trae de nuevo a colación el abandono de una mujer de su casa conservadora, sus hijos y su marido. Pero en la segunda y arriesgada parte de Hnath, Nora -interpretada por Aitana Sánchez-Gijón- vuelve, abriendo una herida que resalta los valores encarnados del feminismo, porque los problemas aún no se han resuelto.
“El deseo de igualdad y el activismo feminista es necesario y ya tiene que suceder algo más drástico, porque estamos en el siglo XXI. Las izquierdas han tratado tema elegantemente, pero no se ha hecho gran cosa realmente”, apunta Lima. Para él, los políticos y la sociedad deben hacer más.
“Ahora tenemos que decir basta ya de esperar, porque los hombres aún no hemos perdido los privilegios y todavía queda camino por hacer”.
Nora no regresa
En una luz que cautiva, hecha por Valentín Álvarez, y los colores pasteles de la escenografía que representa una casita de muñecas, creada por la escenógrafa y vestuarista Beatriz San Juan, Nora se planta para exigir a su marido el divorcio después de 15 años de haberlo abandonado.
Ahora es una exitosa escritora feminista que vive bajo un seudónimo, por lo que será cuestionada sobre sus actos y el tiempo que ha estado desaparecida.
En definitiva, “es la misma Nora reclamando su identidad”, dice el director.
“Nora no regresa, vuelve a pedir un derecho que es la firma del divorcio que su marido no ha querido hacer durante 15 años y rehace su vida, es decir que hace algo que llamamos memorable en la tragedia griega, la heroína abandona a su familia pero se convierte en una maldita. De alguna manera cuando una mujer no atiende a la sociedad patriarcal, tiene que esconderse, y ella está harta de esconderse tras un seudónimo, por lo que desencadena el conflicto de la obra”, explica Lima.
Al respecto, ha señalado que Nora es una “activista feminista de todas las épocas, que sigue teniendo problemas por encajar en el mundo en el que vive”.
No se puede decir por quién votaría Nora el domingo. Las propuestas de los cinco candidatos principales parecen haberse desviado de lo que pide “realmente” la sociedad. Así lo entrevé Lima, vinculado a la compañía Animalario. Aunque se declara como un izquierdista, no teme decir que hace falta mucho por hacer por las justicias sociales.
En vísperas electorales, Lima se ha mostrado a favor del manifiesto Tú decides que han firmado, este viernes 26 de abril de 2019, personalidades del mundo de la cultura. Miguel Ríos, Carlos Bardem, Pedro Almodóvar, Ana Belén, y Joaquín Sabina son algunos de los que han llamado a votar a la izquierda. La de PSOE o la de Podemos. Sin embargo, Lima dice que “sería interesante que la izquierda tomara conciencia de qué se puede hacer realmente en este país, y exista una organización hacia la libertad y fraternidad”.
“Lo que sí es cierto es que aún existen moldes que hay que romper del conservadurismo y en contra del feminismo que no están escondidos, se ven todos los días”.
“No es justo que una sociedad pretenda conservar su estatus basándose en la desigualdad de género y en la económica. España todavía tiene poca cultura democrática”.
El dolor del franquismo persiste y no deja espacio para el diálogo entre izquierdas y derechas. El director, en esto, es partidario de la diversidad y de que no existan blancos y negros. “Todo se ha vuelto muy violento”.
“Hay que abandonar la violencia entre izquierdistas y derechistas tras una herencia de 40 años de franquismo muy dura, y de una Guerra Civil que es la peor que se puede tener porque es entre hermanos”.
En el teatro, por cierto, es que no hay lugar para la violencia y las opresiones. Esto podría cobijarse bajo la bandera feminista de Nora durante su temporada en el Teatro de Bellas Artes.
La obra de Hnath, además, recibió múltiples premios y nominaciones durante su estancia en off-Broadway.