En el último mes, el mapa teatral de Bogotá cuenta con nuevos lugares en donde las artes escénicas son la motivación de tres nuevos espacios.
Con el estreno de la obra Kassandra, la compañía La Maldita Vanidad abrió su Casa II. Vecina a su sede principal, ubicada en la Carrera 19 # 45A – 17 barrio Palermo, esta nueva adquisición de la agrupación de Jorge Hugo Marín, cuenta con un escenario más amplio para sus producciones como para sus actividades académicas. Además de este punto de encuentro para espectadores y artistas, de forma paralela, la Casa II de La maldita vanidad ofrece en su segundo piso, el servicio de hostal para artistas y personas cercanas al teatro.
Camino al norte de la ciudad, se llega al Taller Teatro Vreve, espacio de la agrupación liderada por el director y dramaturgo Víctor Viviescas. Ubicado en la Carrera 28B # 64 – 46 en el Barrio La paz, este espacio que comparte sede con Taller Casa Reflector del también director y dramaturgo Cristhian Ávila, se abrió inmediatamente con una programación variada y constante, en un espacio no convencional que seguramente colaborará en movilizar otra de las esquinas del nuevo punto teatral de Bogotá, el sector del 7 de agosto.
Y si se toma el transmilenio desde el Taller de Viviescas, en la estación Simón Bolívar, llegamos a la estación El polo de la troncal 80, abajo de la Autopista norte, para caminar unas cuadras hasta Sala Uno, la nueva casa de Exilia2 teatro.
Con una programación académica llamada El jardín de Federico y el estreno reciente de la compañía, La piedra oscura dirigida por Víctor Quesada, este nuevo escenario se ofrece como una alternativa de esta zona de la ciudad, respecto a lo que a teatro se refiere. Sala Uno ubicada en la Calle 83A # 23-75, resulta un acogedor espacio para el teatro de pequeño formato que busca nuevos públicos.
Estas son tres de las nuevas salas alternativas que nacen del interés de agrupaciones consolidadas, con el objetivo de seguir creando, y circulando, no solo trabajos propios sino de colegas aliados.